Y uno bien particular. Durante el 6 y 13 de diciembre se desarrollará en la ciudad porteña el Festival de Teatro Container que, tal como su nombre lo dice, tiene la gracia que todas las obras se montan dentro de una de estas cajas metálicas. Un imperdible.
El actor y director de teatro, Nicolás Eyzaguirre, y la arquitecto Daniela Gutiérrez estaban mochileando por México hace un par de años. Todo bien, hasta que una noche se encontraron sin refugio y tuvieron que dormir al interior de un container que encontraron en la localidad de Delicias, en Chihuahua.
Ese primer encuentro con un espacio metálico, cerrado, de dos metros y medio de ancho, por dos y medio de alto y poco más de doce de largo, fue inspirador para ambos. Allí fue donde se les ocurrió transformar y convertir esta caja de metal en una cámara de teatro, en una sala íntima y directa, que acogiera dentro de sus propias limitaciones a la obra y al público.
Tres meses después, en diciembre de 2007, intervinieron la Plaza Sotomayor de Valparaíso con el primer montaje en este nuevo formato. La obra escogida fue Háblame como la lluvia y déjame escuchar de Tenessee Williams, que fue vista por más de 300 personas en sus cuatro semanas de exhibición. Su buena aceptación los llevó a presentarla frente al Palacio de La Moneda, en mayo de este año, y posteriormente en la población La Victoria, donde tuvo la mejor acogida.
Empujados por el éxito de esta primera experiencia y la versatilidad potencial del nuevo escenario que inventaron, se lanzaron a la organización del Festival de Teatro Container en Valparaíso. “Nos dimos cuenta de que si bien el patrimonio cultural tiene una imagen muy potente acá, en lo concreto habían pocos espacios donde se generaban artes escénicas de calidad”, explica Andrés Pedreros productor ejecutivo del evento. Esta gran fiesta teatral tendrá su primera versión desde el 6 hasta el 13 de diciembre, en diversas plazas y espacios públicos del puerto. Se presentarán cerca de 12 obras, en su mayoría creadas especialmente para este formato. No solo habrá teatro sino también música, danza y artes visuales.
Quizás una de las mayores novedades será la presentación de la compañía mexicana Huey Mecat, dirigida por Gonzalo Gutiérrez, que mostrará su composición “cuerdas para container”: un concierto que se interpretará en un pentágono construido con dos pisos de contenedores, en cuyo interior cables tensados serán pulsados con manos, arpas y magnetos.
Entre los experiementos escénicos se desarrollarán obras internacionales, como la belga Baboum Container y la chileno-estadounidense Gallina, gallina, gallina del performista Harmony Molina, entre otras; y nacionales, como Violeta, que recorre la vida de la cantante y compositora chilena Violeta Parra a través de su música y textos; y Capital, montaje preparado exclusivamente para esta ocasión por la compañía La María.
TEATRO EN CONTENEDOR
Los container son parte fundamental del paisaje porteño. En kilómetros de costa hay miles de estos recipientes apilados, esperando su turno para ser cargados o descargados con mercadería que entra y sale del país. “El container un signo muy fuerte del cotidiano porteño y vimos que podíamos aunar pasado y presente en este símbolo”, cuenta Andrés Pedreros.
Como se trata de casi un emblema de la actividad portuaria, empresas de transporte marítimo como TPS y Sitrans se entusiasmaron con recontextualizar este objeto, que forma parte de su trabajo cotidiano. Es por eso que financiarán la mitad del festival y prestarán su apoyo para conseguir, acondicionar y trasladar los contenedores entre los cerros de Valparaíso. ¿Qué tal?
- Más información en www.festivalteatrocontainer.cl.
Por Natalia Araya.
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